El rival era el intratable Nottingham Forest, vigente campeón de Europa dos años seguidos y también supercampeón de Europa, y en la ida el 25 de noviembre de 1980 en el City Ground el equipo cayó 2-1, pero el gol de Darío Felman daba esperanzas de cara a la vuelta y fue muy valioso. En el Colegio Mascarones, un grupo de muchachos que no rebasaban los trece años de edad, encabezados por Rafael Garza Gutiérrez «Récord» y Germán Núñez Cortina, decidieron crear un equipo con los mejores jugadores de la escuela.